Para entender la diferencia entre la bicicleta estática y la elíptica, en primer hay que definirlas. Y la definición de ambas surge de sus estructuras y características.
En este sentido, ten en cuenta que la bicicleta estática es la que simula los movimientos de una bicicleta tradicional, mientras que la elíptica nos obliga a trabajar un grupo de músculos diferente.
Te invito a leer hasta el final y conocer más sobre estos dos tipos de bicicletas para ejercitar, de esa manera puedes definir cuál de ellas aprovechar, o cómo combinarlas si lo crees necesario.
También puedes leer la comparativa de las mejores bicicletas estáticas para comprar.
La principal diferencia: las zonas de trabajo
Para tener un criterio de uso con base a información de valor, ten en cuenta que la bicicleta estática te permite trabajar:
- Los gemelos
- Espalda
- Glúteos
- Cuádriceps
Son zonas muy concretas de tu cuerpo, de manera que puedes concentrarte en lograr objetivos específicos durante tu entrenamiento en una bicicleta estática. Aun cuando también se trabajan otros grupos musculares de apoyo, pero con menor intensidad
En cuanto a la bicicleta elíptica, te permite trabajar:
- La musculatura del tren inferior
- Bíceps
- Abdominal
- Pecho
- Tríceps
Es cierto que algunos de estos músculos se trabajan con la estática en menor proporción, sin embargo, la diferencia está en que la elíptica obliga a estos músculos a ejercer más esfuerzo, bajo algunos casos, dependiendo de tu condición física, esto puede ser una desventaja o factor de riesgo.
Comparativa de variables en cuanto a resultados con bicicleta estática y elíptica
Para que puedas elaborar un mejor criterio, y conocer a detalle otras diferencias entre estos dos tipos de bicicletas para hacer ejercicio, voy a presentarte una comparativa teniendo en cuenta las siguientes variables:
- Calorías
- Intensidad
- Riesgo
- Entrenamiento
- Espacio
#1: Calorías
Ambas bicicletas permiten quemar un alto porcentaje de calorías, solo se deben usar a un ritmo elevado.
Sin embargo, la bicicleta estática te da la oportunidad de quemar más calorías por sesión. Con solo 30 minutos de entrenamiento, una persona de 155 libras de peso, puede quemar hasta 391 calorías, mientras que en la elíptica quemará 333 calorías durante el mismo tiempo.
#2: Intensidad
La bicicleta estática ofrece condiciones para un entrenamiento más intenso, de hecho, se considera como la forma más efectiva de calentar antes de ejercicios cardiovasculares más intensos, o antes de una rutina de levantamiento de pesas.
Con solo 10 minutos puedes calentar y elevar el ritmo cardíaco. Así de intenso es ejercitar con una bicicleta estática.
#3: Riesgo
Es más cómodo ejercitar sentado en una bicicleta estática, aun cuando puedes alternar entre pararte y sentarte para poner en funcionamiento uno que otro músculo.
Sin embargo, las condiciones de una bicicleta estática, permite depositar menos peso en la espalda y las piernas, así que con una postura óptima te libras de todo riesgo de lesiones.
#4: Entrenamiento
Las condiciones de entrenamiento es otra de las variables en las que se diferencia una bicicleta estática de una elíptica, y esto se debe a que las estáticas no generan consecuencias en personas con problemas en las articulaciones o espalda.
Esto se debe a que la bicicleta estática te permite adoptar una posición que no añade peso a esas zonas del cuerpo. Las elípticas son más indicadas para personas que necesitan un entrenamiento cruzado e intenso.
#5: Espacio
A corto, mediano y largo plazo la bicicleta estática es mejor que una elíptica gracias a que no tendrás que acondicionar un espacio solo para ella, puedes tenerla en tu habitación.
La estática es más fácil de usar, exige menos espacio disponible para ubicarla, por lo que es más cómoda en este sentido, además es más compacta que la elíptica.
Con el conocimiento de las características de la bicicleta estática y la elíptica, frente a estas variables, y los beneficios de cada una, puedes tener una mejor idea del por qué la primera podría ser una excelente opción para entrenar en casa.
Conclusión
Ambos tipos de bicicletas te ayudan a hacer un entrenamiento aeróbico en el que participa tu corazón y los pulmones. Puedes completar tu entrenamiento con otros ejercicios de fuerza si lo deseas.
Por otra parte, como una diferencia adicional, es que durante tu sesión con una bicicleta estática puedes tener movimientos más controlados, contar con menos ruedos y entretener tu cerebro viendo televisión o leyendo mientras entrenas para evitar el desgaste.
Por eso, desde mi perspectiva, la bicicleta estática ofrece condiciones más ideales para entrenar en casa, con un ejercicio más mecánico y estático, sin preocuparte por un espacio exclusivo, y controlando la intensidad del entrenamiento.